Los padres a menudo preguntan, ¿cuándo debo empezar a hablar de la universidad con mi hijo? O mi hija está en grado X, ¿qué deberíamos hacer si queremos que haga sus estudios de pregrado en el exterior? Son buenas preguntas para hacer – nunca es demasiado temprano para estar PENSANDO en esto – pero también es bueno recordar que el camino es igual de importante que el destino.  Como padres, hay mucho que pueden hacer para ayudar a su hijo a descubrirse a sí mismo de manera que cuando sea el momento adecuado elegir la universidad o universidad que mejor se ajuste a su perfil sea menos estresante, tal vez incluso agradable. ¿No sería bueno?

El mundo de las admisiones universitarias ha hecho un gran trabajo para generar mucha expectativa, presión, y énfasis en llegar a la universidad o universidad “correcta” que ha llevado a muchas familias a trabajar duro para marcar una serie de casillas para ayudar a sus hijos a convertirse en el candidato “perfecto”. Perfecto es un mito y las universidades más selectivas me respaldarán en esto. Lo que hace que los estudiantes sean excelentes candidatos para una universidad es la autenticidad. Por lo tanto, invito a los padres a apoyar el camino único de sus hijos, para que estos jóvenes desarrollen el hábito de reflexionar sobre cada una de sus experiencias: Lo que les interesa, lo que les da alegría y energía, lo que aprenden de cada oportunidad y cómo pueden seguir creciendo. ¿Puede una universidad mejor clasificada seguir siendo el objetivo en el futuro? Tal vez. Pero espero que cuando llegue el momento de seleccionar y presentarse a las universidades, el enfoque estará en identificar las universidades que mejor se alinean con los talentos, intereses, habilidades y necesidades únicas de su hijo o hija en lugar de tratar de darles forma a lo que creemos que [insertar universidad con nombre prestigioso aquí] está buscando.

Así que aquí hay algunas sugerencias para apoyar la búsqueda de su hijo por sí mismo y para asegurarse de que tenga las herramientas necesarias para asistir y tener éxito en la universidad:

Preescolar (¡o lo más pronto posible!)

Definitivamente, los años de preescolar son demasiado temprano para hablar con su hijo sobre la universidad, pero es el momento perfecto para comenzar a invertir en la educación futura de su hijo. Es muy a menudo que las familias llegan al proceso de solicitud a la universidad solo para descubrir que, aunque su hijo fue aceptado en muchas universidades maravillosas, no pueden pagarlos. Esta es una realidad aún más común para las familias que buscan enviar a sus hijos al exterior. Haga un plan hoy. Incluso la cantidad más pequeña invertida o apartada en una cuenta de ahorros cada mes se acumulará con el tiempo.

Cómo elegir o dónde elegir invertir este dinero es una decisión personal, pero quiero advertir sobre las empresas de seguros de educación que se han vuelto muy populares entre las familias colombianas. Sí, he visto que esta opción quita mucha presión a una familia en el momento de elegir una universidad, pero también he visto que limita las opciones. En algunos casos, los estudiantes que tenían excelentes opciones en el exterior terminaron quedándose en una universidad local porque el seguro de educación era solo para las universidades colombianas. En otros casos, las familias optaron por pagar la multa por salir del programa para que pudieran usar estos “ahorros” para una universidad en el exterior. Mi sugerencia es que si usted tiene el dinero para invertir, elija una opción que le da más control – que le permitirá beneficiarse de todo el interés hecho en la inversión y decidir dónde gasta el dinero.

No importa lo que decida, decida hoy y deje que ese dinero comience a crecer.

Primaria

Los años de primaria son un gran momento para reforzar el amor por el aprendizaje y por la lectura. Habla con tus hijos sobre su día. Pregúntales sobre los errores que cometieron y celebra las oportunidades de aprendizaje que surgen de ellos. Cuando los niños desarrollen una mentalidad de crecimiento, estarán más abiertos a explorar cosas nuevas y descubrir lo que les gusta y no les gusta, donde tienen talentos naturales, y donde necesitan poner más esfuerzo si quieren tener éxito, y todo sin el miedo a fracasar, que es una pieza clave del aprendizaje.

La lectura también es un hábito que ayudará a sus hijos a ser mejores pensadores y mejores comunicadores. Reserva tiempo todos los días para leer, ¡mejor aún que sea una actividad familiar!

Escuela Media

La escuela media es el momento de asegurarse de que su hijo sepa que la universidad está en su futuro. Comparta sus propias experiencias y tal vez hable con él sobre la aventura de estudiar en el exterior, especialmente si esto es algo que desea para su hijo. La idea de salir de casa puede ser abrumadora, así que cuando sea posible, aproveche las oportunidades para que su hija pase más y más tiempo lejos de usted. Muchas escuelas tienen excursiones que comienzan con una noche de campamento en Cota, por ejemplo, y eventualmente se convierten en una semana en la selva amazónica, La Guajira o Ciudad Perdida. Los campamentos de verano y los programas de inmersión de un segundo o tercer idioma también son excelentes opciones, y pueden ser una oportunidad para que su hijo explore otras culturas y viajes internacionales separados de usted. Por supuesto, los viajes familiares al exterior también son grandes maneras de explorar el mundo con sus hijos y tener conversaciones sobre lo que les encanta de las visitas a otros lugares, y tal vez las cosas que son desafiantes.

Durante la escuela media, anime a su hijo a seguir explorando y reflexionando sobre lo que lo define como un individuo: intereses, talentos, áreas de mejora o dificultades. Si su hija nunca ha jugado un deporte o un instrumento, este es un buen momento para animarla a probarlo, antes de decidir que no es musical o atlética.

Finalmente, la escuela media es donde usted quiere apoyar a su hija para desarrollar habilidades fuertes de estudio y prueba. Esto puede incluir el uso de un calendario para realizar un seguimiento de las tareas, los proyectos y los próximos exámenes; tener un espacio especial en casa para estudiar y completar el trabajo escolar; y tomarse el tiempo para entender los comentarios de los docentes cuando se devuelve una tarea o prueba. Algunos estudiantes son mejores en tomar exámenes estandarizados que otros, pero los padres pueden apoyar a sus hijos para que se preparen para el éxito: Comer bien, dormir lo suficiente, estudiar para que se sientan seguros y hacer su mejor esfuerzo. El mundo está cambiando y aunque muchas instituciones educativas están poniendo menos énfasis en las pruebas estandarizadas y más en el aprendizaje experiencial y basado en proyectos, estos exámenes probablemente no desaparecerán por completo. Desarrollar una actitud saludable en torno a las pruebas ahora ayudará a su hijo durante sus años en la secundaria, cuando su rendimiento académico importará para la entrada a la universidad.

Bachillerato Alto

El bachillerato alto es realmente el momento en que los estudiantes necesitan estar pensando en la universidad. Muchas universidades requieren ver las notas de los últimos 4 años de escuela, lo que significa 8° a 11° grado en el sistema colombiano o 9° a 12° grado en la mayoría de los sistemas internacionales. Las universidades que evalúan a los estudiantes de manera integral, los Estados Unidos es el líder en esto, también estarán interesados en las actividades del estudiante más allá de lo académico – extracurriculares, liderazgo, trabajo voluntario y experiencia laboral. Si bien gran parte de la responsabilidad en este momento recae en el estudiante, como padres, es bueno ser consciente de lo que los estudiantes deben estar trabajando y pensando y apoyarlos con esto.

• 9° Grado (Freshman/ 8° grado en el sistema colombiano) Los estudiantes tienen que comenzar bachillerato alto fuerte. Las notas son el componente más importante de cualquier solicitud universitaria y el objetivo es que los estudiantes sientan que hicieron lo mejor que pudieron y no se arrepienten cuando comienzan el proceso de búsqueda y solicitud universitaria. Los padres pueden hablar con sus hijos sobre los promedios y hacer algunos ejercicios para mostrar cómo una calificación baja afectará el promedio para siempre. Los estudiantes también tienen que tomar decisiones sobre cómo se involucrarán en la escuela y en su comunidad. Con suerte, a través de su exploración en escuela media han encontrado áreas de interés y talentos que les gustaría fortalecer. Estas serán actividades que comenzarán a ayudarles a formar su identidad. Los padres pueden ayudar a sus hijos a realizar un seguimiento de estas actividades para que más tarde puedan formar parte de su primer CV. Finalmente, este es el momento para que los estudiantes comiencen a explorar carreras. Elegir una carrera puede ser una tarea abrumadora y por lo tanto es genial ayudar a su hijo a comenzar a pensar en cómo sus intereses, talentos y participación en la comunidad puede traducirse en carreras. Ayúdelos a conectarse con amigos y familiares para que puedan entrevistar a diferentes personas sobre sus trabajos o acompañarlos en el trabajo por un día para tener una mejor idea de lo que un abogado, doctor, ingeniero químico, maestro, diseñador, etc. realmente lo hace en su trabajo diario. Habla con ellos sobre estas experiencias y ayúdales a reflexionar sobre las partes que les parecieron interesantes y tal vez las tareas que no podían imaginar hacer. Esto debe ser divertido e interesante, no estresante o agresivo. La idea es simplemente conseguir que hagan conexiones entre quiénes son y cómo les gustaría que eso se tradujera en su vida laboral.
• 10° Grado (Sophomore/ 9° grado en el sistema colombiano) En este segundo año de bachillerato alto, los estudiantes deben seguir brillando. En otras palabras, continuar haciendo su mejor esfuerzo en sus clases, pero también encontrar maneras de liderar en las áreas que más les importan. Al respecto a la universidad, este es el año en que los estudiantes deben comenzar a explorar los programas o pensúm y considerar lo que podrían querer estudiar en función de sus intereses profesionales. Otra actividad que puede ayudar a los estudiantes a comenzar a pensar aún más sobre la universidad y dónde les gustaría estudiar es una visita a un campus universitario. La experiencia de caminar en un campus universitario, ver a los estudiantes mayores socializando y asistiendo a clase, y tener una idea de todos los recursos que tienen las universidades es una gran manera de ayudar a su hija a visualizar su propia experiencia universitaria.
• 11° Grado (Junior/ 10° grado en el sistema colombiano) Este es el año en que los estudiantes realmente necesitan comenzar a desarrollar su plan para seleccionar y aplicar a colegios y universidades. El primer paso es desarrollar una lista de colegios y universidades que tienen muchas de las cualidades que está buscando – esta debe ser una conversación familiar donde ustedes, como padres, comparta lo que están imaginando, pero donde también escuchen lo que su hijo está esperando. Hay muchas herramientas y recursos para crear esta lista, hacer la investigación y tomar la decisión. Esto puede incluir reuniones con colegios y universidades tanto en persona como virtualmente. Este es también el momento de considerar el apoyo que necesitará (más información sobre consejeros escolares, IECs y agentes aquí). Es importante tener en cuenta que el cronograma de cada país para el proceso de solicitud a la universidad es un poco diferente, tomar decisiones ahora sobre dónde su hijo podría querer estudiar asegurará que él no se pierda ninguna gran oportunidad, incluyendo becas que frecuentemente tienen plazos anteriores y requieren pasos adicionales como ensayos o entrevistas.
• 12° Grado (Senior/ 11° grado en el sistema colombiano) Este debería ser el mejor año de su hijo. A menudo se establece la “senioritis” y los estudiantes se relajan un poco y no hacen su mejor esfuerzo; esto es lo contrario de lo que deberían estar haciendo. Deben obtener las mejores notas, ser líderes en las cosas que les importan y aprovechar al máximo este último año del colegio. Los padres pueden ayudar celebrando el año, manteniéndose al tanto de cómo su hijo está pasando su tiempo, y recordándoles que las universidades se preocupan mucho por el rendimiento académico en este último año. Esto es también cuando los estudiantes presentarán sus solicitudes, generalmente en el primer semestre del año (Calendario B), por lo que les ayudará a revisar su lista de verificación de lo que deben presentar para cada una de sus solicitudes, apoyarlos si no están recibiendo respuestas del registrar o secretaria académica o si tienen dificultades con las plataformas en línea. Una vez más, las solicitudes de becas son parte de este proceso y las mejores becas y ayuda financiera van a venir directamente de las universidades – si usted sabe que su hija debe recibir apoyo financiero en forma de ayuda o becas de mérito, asegúrese de que entiende esto y lo está haciendo parte de su proceso de solicitud. Una vez que las solicitudes están entregadas, habrá un período de espera que puede ser estresante y luego las respuestas comenzarán a llegar de los colleges y universidades. Esta puede ser una de las primeras veces que su hijo o hija ha experimentado realmente la decepción, porque si han hecho un buen trabajo de construir su lista de la universidad, habrá universidades que son un reto para ellos y por lo que lo más probable es que reciban un “no” de al menos una universidad. El apoyo y el aliento de los padres en este momento es clave: Hágale saber a su hijo que sus sentimientos son válidos y que estos son momentos que todos experimentamos en algún momento de nuestra vida, la clave es desarrollar un plan para avanzar y centrarse en las opciones que están disponibles para él. Los consejeros o consultores educativos también son un gran recurso en este momento, ayudando a los estudiantes a evaluar las opciones y llegar a la decisión final. Mientras acompaña a su hijo en su preparación para salir de casa y dirigirse a la universidad, asegúrese de recordar a agradecer a aquellos que han ayudado en el camino: Aquellos que brindaron asesoramiento, escribieron cartas de recomendación, ofrecieron tutoriales en preparación de los exámenes y más. Me gusta animar a los estudiantes a regalar cartas escritas a mano a estas personas; ¡añadir este toque personal es muy especial!

El camino de su hija será tan único como ella. Como padres, su papel es ayudar a su hijo a descubrirse a sí mismo y guiarlo a hacer lo mejor posible. Este es un proceso largo pero hermoso y cuando somos intencionales al respecto, el resultado es una joven feliz y segura con un plan para su futuro. ¡Disfrútalo!

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